¡It´s Karuta time!
¿25 episodios más de encantador romance y divertidos torneos karuta? Sí, por favor. Pero no esperes un balance entre los dos, en esta segunda entrega hay muchos más enfrentamientos que en la primera temporada, y si terminarás satisfecho o no una vez que hayas terminado los 25 capítulos dependerá de tus preferencias y de lo que estés deseando ver.
¿Quién esperó, o incluso imaginó que las competiciones y los duelos de Karuta serían tan feroces y emocionantes? Definitivamente yo no, no lo vislumbré hasta sumergirme profundo en el argumento de la primera temporada. El karuta puede resultar complicado, es más difícil que deportes populares como el beisbol, basquetbol o soccer, y en toda la primera temporada se enseña que se necesita mucho más que buenos reflejos y gran memorización para hacer frente a tus oponentes. El karuta es más que sólo personajes moviéndose rápido y golpeando cartas por todos lados, hay agregados y situaciones especiales que sazonarán cada episodio y sin ninguna duda te mantendrán al filo de la butaca.
De eso es de lo que trata esta segunda temporada; karuta, karuta y más karuta! Chihayafuru 2 es una secuela directa a la anterior.
Ahora Chihaya y su equipo se encuentran en segundo año de secundaria y están más experimentados que nunca. Es así que la líder del equipo se plantea varios objetivos, entre los que figuran no sólo ganar el torneo por equipos, sino también la competencia individual en cada una de las categorías y además obtener el trono de la Reina. Suena un poco complicado, ¿no? Tomando en cuenta que aún están en periodo escolar, pero estamos hablando de Chihaya, esa chica hermosa pero poco femenina que arruina todo apenas abre la boca y que sólo guarda lugar en su cabeza para el karuta ¿Quién va a detenerla? Pueden apostar que sus ambiciones la llevarán muy lejos.
A pesar de ser una secuela directa hay algunas diferencias que podemos notar. Aparte de la integración de nuevos miembros al club la esencia sigue siendo la misma, únicamente se ha dado un paso adelante, es decir, ahora nos encontramos en el lugar en el que la primera temporada nos quería posicionar; se acabaron las prácticas y los juegos de niños, es momento de que nuestros protagonistas se enfrenten a los mejores jugadores de karuta de Japón. La característica central de Chihayafuru 2 son los torneos y en ellos podremos ver desde la perspectiva particular de cada uno de los competidores la intensidad con la que viven cada enfrentamiento, cómo utilizan sus conocimientos y técnicas adquiridas a través de los años y largas horas de entrenamiento para enfrentar a sus contrincantes, y cómo se sufre o se goza cuando se pierde o gana un duelo. Si deseas más screentime de lo que te dio la primera temporada de los personajes que compiten karuta entonces estarás complacido. Si esperabas que en esta entrega se acentuaran los arcos amorosos y ver cómo se formaron y desarrollaron las relaciones de nuestros personajes, entonces quedarás un tanto decepcionado.
La ejecución específica de cada partida de karuta resulta intensa. Calculo que más de la mitad de la temporada está enfocada o abarca los momentos de participación en estos torneos, sin que un solo encuentro haya llegado a ser aburrido. Cada partida se desarrolla con inteligencia, gracia y potencia, además de tener algunos tintes lúdicos de vez en cuando. El acompañamiento de la animación, una buena banda sonora y la pasión y el espíritu con el que se desenvuelve cada encuentro, mantienen un ambiente muy juvenil, fiel a la esencia de Chihayafuru.
Pero el karuta no sólo es intensidad en cada partida, esta segunda temporada también explota el deporte de una manera más exhaustiva y profunda. El karuta se vuelve emocionante debido a la dedicación de cada uno de los jugadores, y no me refiero sólo a que pertenecen a diferentes niveles y tienen diferentes tipos de habilidades, estilos y tácticas, me refiero a la razón principal por la que están o continúan jugando. Determinación, placer, motivación, el deseo de trabajar en equipo o para ellos mismos, o si se hace para honrar la memoria de alguien especial o sólo por diversión, todo esto está presente en los jugadores de Chihayafuru. Además, profundizamos en los razonamientos de cada uno de ellos, que se pueden ramificar hasta recuerdos y experiencias pasadas donde descubriremos las dificultades que han tenido que superar para alcanzar el nivel que poseen. Seremos testigos también, de que independientemente de que se trate de una victoria o una derrota, siempre hay un precioso aprendizaje.
Esa es la razón por la que esta temporada o al menos gran parte de ella, está llena de momentos que abrazarán tu corazón y harán rodar una o dos lágrimas por tu mejilla. Situaciones en las que sentirás la necesidad de apoyar a tu contendiente favorito, como Chihaya, cuando se encuentra en una partida para lograr sus sueños, o los novatos que se esfuerzan al máximo para demostrar que ellos aman tanto al karuta como sus senpais. Al final de los encuentros, no se demuestra quien es mejor y quien peor, sólo queda plasmado cuán duro han trabajado, cuán grande era su convicción y cuanto disfrutan jugar al karuta.
Los personajes se encuentran en una amplia gama de variedades, todos tienen diferentes personalidades. Particularmente a mí me resultaron agradables todos los personajes principales y también los secundarios. Paulatinamente iremos conociendo a cada uno de ellos aunque no a todos con tanta profundidad, algunos sólo serán oponentes cuyas derrotas no te entristecerán.
La velocidad con la que se desarrollan las acciones es algo que se debe comentar, se necesita prudencia al seguir este anime ya que los duelos pueden durar desde uno hasta tres episodios. Puede parecer un lapso largo pero es necesario hacerlo de esa manera para poder explorar y analizar los puntos de vista de cada personaje durante la partida. Este ritmo es necesario, ya que así se puede sentir la tensión en cada duelo, aunque algunos pueden resultar algo predecibles, se centraron más en la profundidad de los jugadores, una decisión acertada para una producción como Chihayafuru.
En cuanto a la parte romántica de Chihayafuru, la primera temporada contiene una mayor porción de la misma, esto no significa que no haya en esta secuela, pero a diferencia de la primera no hay episodios que se dediquen enteramente a ello. El triángulo amoroso entre Chihaya, Taichi y Arata pasa a segundo término. Se debe a esto el comentario que hice el principio de la entrada, depende de cuales sean tus expectativas y qué género y acciones busques es lo mucho o poco que gustarás de este anime. Personalmente estaba ansioso por obtener algunas respuestas en cuanto al triángulo amoroso – o cuadrado -, pero el hecho de que algunas cosas no se diluciden no le resta valor al anime para nada.
Las nuevas canciones agregadas en el soundtrack y que están orquestados con instrumentos como piano y cuerdas, guitarras acústicas, bajo y batería e incluso flautas y tambores le dan una personalidad maravillosa a la serie.
Estoy contento de que aún se sigan emitiendo series con calidad como Chihayafuru. Con esta producción Madhouse ha demostrado que incluso fuentes que parecen poco prometedoras pueden ser adaptadas y el resultado final bastante decente.
Así es como me presento en esta comunidad, si todo va bien estaré haciendo alguna reseña de vez en cuando. Toda crítica constructiva es bien recibida. Saludos afectuosos–
Imágenes: © Madhouse, Yuki Suetsugu.