Hola a todos! Esta es mi primera reseña, pensé mucho en publicar porque para mi nunca está nada bien, pero ni modo. Espero que los que no hayan visto esta película se animen a verla porque a mi de verdad me encantó.
A muchos nos han dicho hasta el hartazgo que el anime (la animación en general) es cosa de niños, me han dicho que debería madurar, que las tramas son lentas, que son estúpidas, y un largo etcétera. Sin embargo, muchas de estas personas no le dan la oportunidad a este tipo de productos audiovisuales porque tienen la predisposición de que todo lo animado guarda alguna remota relación con las producciones de la línea de Disney.
En mi intento por desmontar el prejuicio de que toda animación es para niños, me di la tarea de buscar películas de anime que trataran de temas considerados para adultos, escribir mis impresiones de ellas, compartirlas, y al mismo tiempo ampliar mis conocimientos sobre el anime. Y es en el inicio de esta búsqueda cuando me topé con la película que trataré en esta oportunidad: Perfect Blue.
Perfect Blue es la primera película dirigida por Satoshi Kon, basada en la novela homónima de Yoshikazu Takeuchi, y fue estrenada en 1998.
Sinopsis
El filme nos cuenta la historia de Mima Kirigoe, una popular Idol integrante del trío Cham, que abandona el grupo para perseguir una carrera como actriz. Desde un principio se nota que esta chica no está segura de si ser una actriz de doramas es lo que realmente quiere, pero al no querer decepcionar a sus representantes, que la han llevado hasta el lugar de popularidad donde estaba, se deja llevar. El
hecho de no estar segura de si el camino de la actuación es el correcto y el resentimiento que siente por parte de sus fans, comienza a afectarle. Pero las cosas comienzan a complicarse cuando descubre que alguien lleva un blog haciéndose pasar por ella, describiendo con escalofriantes detalles todo lo que hace a diario (cuando Mima ni sabe prender una PC), y gente cercana a ella comienza a ser asesinada.
Es en este punto cuando la película se desvela como una muestra de lo que la paranoía puede hacer a la psiquis de una persona: Muchas veces dentro de la trama no sabemos si la escena en la que estamos es la “realidad” dentro de la diégesis planteada desde un principio, o si estamos dentro de las alucinaciones que comienza a tener Mima. Y esto es precisamente lo que me encantó de Perfect Blue: Nos adentra tanto en su maraña de terror, confusión y paranoia, que llegamos a sentir lo mismo que la protagonista y nos hace acompañarla en su descenso al infierno de una mente atribulada. Todo esto en apenas 81 minutos, sin necesitar ni un segundo más para contarte una historia de horror personal, violencia y autodescubrimiento.
No me sorprendió enterarme que Hollywood hubiera puesto los ojos en Perfect Blue, en este caso el director Darren Aronofsky, quien incluso compró los derechos para hacer un remake de la cinta, pero que terminó haciéndole homenaje en sus obras Requiem for a Dream, en la escena de la tina con Jennifer Connelly (Copia exacta), y en Black Swan, que es la que guarda más similitudes con la ópera prima de Satoshi Kon, que me dejó con ganas de ver más de los trabajos que dejó.
Perfect Blue es solo una de los ejemplos que demuestran que el anime no es solo para niños, y que puede tratar temas complejos tan bien, o incluso mejor, que producciones no animadas. Esta es una obra que todos, fanáticos del anime o no, pueden disfrutar.
Imágenes: © Madhouse, Rex Entertainment.