Reseña Videojuego: «Ikaruga» por Wolfwood
¡Saludos una vez más a todos nuestros fantásticos lectores! Como es lo habitual me presento ante ustedes con el fin de ofrecerles una humilde opinión acerca de ciertas maravillas audiovisuales de origen oriental que por ciertos motivos particulares no han recibido toda la atención ni reconocimiento que estoy seguro merecen.
En esta oportunidad les he traído un juego de aquellos que se alzan como un icono de calidad y creatividad; porque hoy en día cualquier persona interesada en los videojuegos comprende a cabalidad lo que espera encontrarse dentro del clásico género denominado «Shoot ‘em up«, esta producción destacada rebosa originalidad y decide dar un paso más arriesgándose a introducir conceptos totalmente frescos gracias a lo cual se les regresa la posibilidad de asombro a los «gamers» cansados de los mismo títulos repetitivos y planos. Artísticamente magistral, ambientaciones sonoras que despertarán emoción en cada nivel y elementos de jugabilidad que otorgan una mezcla de lo tradicional con lo novedoso; sin más que agregar es todo un placer dejarlos junto a…¡»Ikaruga«!
Desarrollado por la compañía Treasure y estrenado a finales del 2001 Ikaruga nos narra la historia de una pequeña nación llamada Horai, la cual alberga un enigmático e inmenso poder ancestral escondido en la profundidad de sus dominios. Tenro siendo el malvado de turno y uno de los hombres más poderosos de aquellas tierras logra tomar para su beneficio aquel misterioso poder y gracias a esto comienza una sangrienta carrera de conquista mundial, sin embargo; una asociación de justicieros llamada Tenkaku surge desde los horrores de la guerra para detener las atrocidades cometidas por aquellos hombres sedientos de poder. Luego de una épica batalla todos los chicos buenos terminan siendo derrotados, todos menos Shinra (nuestro principal héroe); quien luego de caer en un olvidado pueblo conocido como «Ikaruga» promete derrotar a Tenro. En vista de su determinación los aldeanos de Ikaruga confeccionan una nave de combate muy especial que ayudará a nuestro protagonista a conseguir su objetivo y librar al mundo de la inminente destrucción; es así como comienza un último combate que decidirá la suerte del planeta y todos sus habitantes.
En cuanto al apartado técnico, este juego posee una notable calidad en prácticamente todos sus aspectos; si bien superficialmente puede erróneamente pensarse que tan solo se trata de otro juego de naves, al jugarlo es apreciable desde los primeros momentos todo un estilo artístico único y muy bien cuidado; desde el diseño de cada etapa hasta al galería de imágenes disponible es posible resaltar un gran trabajo lleno de detalles junto a un desarrollo de primera línea.
Acerca de la jugabilidad en sí y las mecánicas de juego asociadas cabe destacar la inclusión de un concepto hasta aquel momento impensado el cual añade todo un abanico de posibilidades y profundiza fuertemente el potencial del producto, además de desafiar sin ningún suavizante las habilidades del jugador; aquel concepto se basa en el uso de polaridades pues verán, nuestra nave de combate puede alternar su polaridad entre blanca y negra, al tiempo que existen enemigos de ambas polaridades. Si se utiliza la polaridad contraria a la de nuestro atacante éste recibirá mucho más daño, pero por otro lado al utilizar la misma polaridad se accede a la posibilidad de absorber los disparos enemigos y cargar nuestra energía para soltar un ataque especial; es de esta forma como el juego nos invita a descubrir las numerosas posibilidades en cuanto a estrategias y formas de enfrentar las incontables hordas contrarias en busca de destruirnos, además de unos difíciles (créanme…muy difíciles) jefes finales en cada nivel (siendo 5 capítulos en total).
Finalmente la banda sonora es realmente una obra de arte, las intensas pero profundas pistas de audio se sitúan como el pegamento que mantiene unido a todos los factores que hacen de este juego un producto que ha quedado en la retina de todo el rubro dedicado a los videojuegos por más de 10 años. Con la intención de que observen las maravillas que pueden realizarse gracias a este título, los dejo junto a un vídeo muy peculiar en donde un experto utiliza dos naves al mismo tiempo; como dicen por ahí…si piensas que eres bueno en algo, siempre habrá un koreano que lo haga mejor.
Eso es todo por esta ocasión amigos, ¿dudas o comentarios? no vacilen en escribir y responderé encantado, nos veremos en una próxima oportunidad.
¡Hasta la próxima!
Imagen: © 2001 Treasure
